Ella llegó con su maleta a casa despues de tres días de viaje por el interior de su tierra y el fondo de su cabeza, tres dias de desmenuzar su presente ordenando las diferentes piezas e intentando poner la de sus desencuentros con él en un lugar cómodo, un lugar donde él tambien se encuentre a gusto.
Al llegar a casa , alguien le dijo; ayer salí, vi a varias personas que conoces y lo nombró.
A ella le recorrió un escalofrio por el cuerpo y respondió .- ah si? y que tal esta?. Como sin darle importancia, como si de una persona cualquiera se tratara, pero tiene la sensacion de que hace mas calor de la cuenta en ese momento y de que va a dejar ver cosas que no quiere que nadie sepa, y se va a su mesa, a sus cosas, y abre una página y se lo encuentra a él, sus palabras que dicen tanto, palabras a las que ella siempre se abraza porque son a lo unico que se puede agarrar desde hace meses, y tiene la certeza de que él tambien la echa de menos muchas veces. que no solo es ella la que sueña con sus brazos, con sus besos, con esa pasión febril que les entra cuando se tocan, con esa sensación de que todo esta en orden que tiene cuando estan abrazados aunque los dos en su interior sepan que el siguiente paso es separarse y verse sabe dios cuando y como.
Ella también sabe que las cosas son como el las dice, que siempre estan a punto de cruzarse pero no se cruzan, que a ella le resultaria muy facil ir a su encuentro muchas veces y no lo hace aunque sea lo que mas quiera en ese momento, que uno va y otro viene, que ese es el latido de su relación......el maravilloso y despiadado latido de su relación.
