RETRATO DE UNA NENA
autores: Joyeros Hermanos Hernández
Vigo - año 1.935
Tenia solo 7 años, la niña con cara de ángel y ojos azules.
Todos lo días salía del colegio bien agarrada de la mano de su admirado padre, hombre de mirada inteligente, gesto valiente, belleza serena e idéas claras y nobles que muchos querían ya arrancarle de la cabeza y el corazón.
La niña no queria ir, Ana María se aburría en esas largas horas que pasaba en casa de aquellos señores que le decian que tenia que estar muy quieta y derecha , a ella, la niña que parecía hecha de rabos de lagartija que solo queria correr a ver a su madre y a sus hermanos, sobre todo a Quico, su compañero de infancia y juventud, hermanos cómplices que se querrian de una manera especial para el resto de sus vidas y unidos por una complicidad que dura hoy todavía.
Hoy se que Ana Maria está orgullosa de esas horas que pasó quieta y enfadada bajo la atenta mirada de su padre mientras las manos de tan ilustres artistas creaban su obra.
Ana Maria hoy se acuerda de ese trabajo que su padre y ella hicieron a medias, juntos, muy orgullosos el uno del otro, compartiendo ese tramo de vida que sé que ella guarda como un tesoro.
Ese retrato es un recuerdo de una época dulce que poco después la historia de éste país se encargó de volver amarga.
Se que hoy Ana María ha vuelto a recordarlo cuando su cara de ángel ha sido expuesta por fín, en un muséo de nuestra ciudad.
Ana Maria, mi madre, a la que quiero con todo mi corazón ha vuelto a ser hoy esa niña, y sé que mi abuelo desde alguna parte, la ha vuelto a proteger sujetándola bien fuerte de la mano.
Un recuerdo para todos vosotros, mi querida, fantástica, excéntrica, inteligente y divertida familia Blein Corral. para los que ya no estais y para los que afortunadamente seguis con nosotros.
Quien se atreve a criticar nada de lo que hayais hecho? ¡¡como se os complicaron las cosas y como de la mano de mi valiente abuela aprendisteis a vivir con ese profundo vacío que dejó vuestro padre!!
Nunca habeis dejado a nadie indiferente, por rebeldes, por contestatarios, por extravagantes o por lo que os daba la gana. Solo se que yo, vuestra hija, nieta, y sobrina me he sentido muy querida por todos y cada unos de vosotros.
Por lo tanto a mis valientes abuelos, a mi madre y mis seis tíos ¡ QUE EL ESPECTACULO CONTINUE Y QUE ESTA FIESTA NO DECAIGA!